Ir al contenido principal

CARDAMOMO




- Rarezas de la Pitia: Me ponen los tíos con falda y la palabra Cardamomo.
-¡ Nos ha jodido!, hay faldas y tíos, tíos y faldas...
- ¿Y el cardamomo?.
- Puede que por el olor.
- Me turba su sonido de caja, su quejido de seda rasgada a empellones de amor o lo que sea. Es un paso negro y descalzo en albero escondido. Un sucedaneo de lo que pudo ser aunque no llegué ni a soñarlo. A sangre en el labio vivo y de una noche cualquiera, como a revolcón de marca blanca pero que se come a cucharadas espesas, no se, marrón, rasposo. Suena a falda de tío con torso desnudo que suda y te mira guarro pero vencido. Flequillo a los ojos, ombligo de plata negra y los nudillos de piedra.
- Ponme un gramo... 
- ¿De cardamomo?.
- ¿Qué si no?...
- Ay...
- ¿Te duele?
- No, me sale un suspiro doble.
- On the rocks?.
- On the leches, no te jode...
- Jodido carácter el de la bruja.
Suspiro (doble).
- Ya.. será que le tengo intolerancia al cardamomo.
- Si, como el que le tienes al pescado, a las almendras y a la piña... puta mentirosa.
- Largo de mi templo.



Comentarios

enne ha dicho que…
me ha encantado el texto, de verdad, es precioso :)

Entradas populares de este blog

TIERRA DE NADIE

Soy la tierra de tu nadie. La pendeja cazadora de frases con mejor intención que acierto, como la de que AMES DE VERDAD Como si se pudiese amar de mentira y seguir siendo eso que empieza con su legítima A y que se muere en su pertinaz                                                                                                       R No quiero que hagas las cosas con buena intención, LAS QUIERO SOLO INTENCIONADAS. Quiero que se me clave TU MALDITO anillo de ...

ALICIA EN EL PAÍS DE LAS MARAVILLAS

  No puedo pensar en lo sorprendente y lo sencillo que resulta vivir casi siempre: se vive sin querer y a pesar de no ponerle demasiado empeño al asunto la mayor parte del tiempo. No puedo pensar en lo frustrante que será el día que descubra que ya no hay más créditos ni más monedas y ya no me queden vidas de gato ni de nada que resucite aunque sea de mentira. Recuerdo haber pasado por todos los cuentos que pensaba pertenecían a otros personajes y disfrutar de cada una de sus victorias y también sus derrotas de cuento. Agradezco los maquillajes en los morados que me quedan fruto de todas esas  peleas imaginarias que mantuve inútilmente con cada uno de los fantasmas a cuyas sábanas me así con la desesperación de las últimas oportunidades. Me quedo con el agua. El agua siempre limpia, refresca, calma y sirve para hacer infusionar el té. - ¡Que le cooooorten la cabeza! - dijo la reina. Y yo me retiré el pelo de la nuca y me puse a cuatro patas, las de morir, se entiende, que no l...

MARCAR TERRITORIO

Animalitos territoriales. Lamiéndose la pata en lo alto de la empalizada mientras otean su reino ante la incertidumbre de cuanto durará la calma antes de que, de nuevo, un nuevo bichito entre a hurtadillas y pretenda alzar la meada contra un tronco recóndito, inundando de su esencia todo el rincón, con el viento como cómplice hasta que las uñas, en todo lo alto, devuelva el honor al defenestrado... o no...