Pues claro que chochéa. Es mayor y se ha metido mucha cochinada en el cuerpo para apuntalarlo. ¿Quién le puede tener en cuenta esos comentarios acerca deque "no frabrica por encima de la talla 36 porque por encima de esa talla todas son (somos) obesas", o que las mujeres que le critican son (somos) unas "amargadas que comen chucherías sentadas en un banco del parque". Pero, ¿no véis que es una persona mayor, muuuy mayor?. Y aunque la regla dice que la sabiduría se alimenta de la experiencia, por lo que nuestros mayores son sabios a los que debemos tener muy en cuenta, también es cierto que todos podemos sufrir en nuestra vejez episodios de demencia. ¿En serio no le tenéis un tanto de piedad?. ¿Acaso no os da una pista sobre la solvencia de sus comentarios ese disfraz de playmobil "Nochevieja" con el que se paséa?.
No creo que el pobre hombre sea responsable de herir la sensibilidad de montones de personas en el mundo. Creo que la idea desafortunada parte de los medios de comunicación y de la desmedida difusión que se le ha dado a la sarta de tonterías que se le han escapado por la boca al pobre señor. Mi abuelo (que por ende tendría, de vivir, la misma edad de Lagerfeld), decía marranadas a las mozas que pasaban por delante de su puerta en el final de sus días (entendamos por marranadas cosas como "vaya culo mas bien puesto" o "si no fuera por estas dos muletas te iba a dar yo a ti lo tuyo"), pero nadie se ofendió, porque mi abuelo era un señor mayor algo demenciado y que no lo hacía con ánimo de ofender, todos sabíamos que sólo quería llamar un poco la atención antes de que un fallo multiorgáncio lo devorara (aunque al final secillamente se lo llevó la muerte).
Yo sólo pienso en el pobre señor Lagerfeld, recien levantadico por la mañana, con su albornoz de a 5000, en su mansión fastuosa, solo, ante el espejo, mirando las marcas de los pespuntes que le ha dado y que sin maquillaje cantan por soleares. Enfrentado a sus ojillos que ya no ven, a su piel sin fotoshop, a los pelinos sin sesión de peluquería. Las canillas, las rodillas caidas, que ya no hay Dios que las levante y el baluarte masculino mucho menos triunfante, sin duda. Se me cae el alma sólo de pensarlo. Ese amante pagado entre las sábanas en las que seguramente alguno de los dos ha fingido. Qué tristeza.
Yo también arremetería contra las personas normales, aquellas felices sin artificio y que no necesitan una cohorte de lacayos para sentirse valiosos. Si no lo hiciera así quizás podría caer en la tentación de sentirme un personaje de cartón piedra.
Yo también arremetería contra las personas normales, aquellas felices sin artificio y que no necesitan una cohorte de lacayos para sentirse valiosos. Si no lo hiciera así quizás podría caer en la tentación de sentirme un personaje de cartón piedra.
Respetemos al Sr. Lagerfeld. Lamentablemente no todos consumiremos sus productos, bien por tamaños inadecuados a nuestras necesidades o por precios estupidamente inflados (a mi es que no me gusta que me atraquen, que tía mas rara soy).
Y por encima de todo: No le demos demasiada importancia a sus declaraciones. TODOS SEREMOS MAYORES Y TENDREMOS MIEDO A SER OLVIDADOS Y A FALTA DE SABUDIRÍA TIRAREMOS DEL ESTUPIDIARIO.
Comentarios
gracias por tu visita!! un beso!! he leído algunas entradas, muy chulo el blog!! :))
La mastica y la escupe, por tanto se queda con todas las vitaminas, proteinas, oligoelmentos pero no con las grasas.
Es por ello que le ha quedado aspecto de ajo, ya ves tú, ya ves tú.
Ni caso, y si me lee alguien, ni se le ocurra hacer eso ¡eh! Un beso :)